Tal día como hoy, un 26 de octubre, en el año 1980, jugaba su primer partido oficial con el primer equipo Santiago García Barrero tras haberse formado desde los nueve años de edad en la cantera del club.
García Barrero, nacido en Oviedo el 24 de agosto de 1961, creció en un ambiente muy oviedista. Su padre, Falín, y su tío, Emilín, fueron dos de los grandes jugadores de la historia del Real Oviedo. En 1980 le tocó al joven Santi tomar el relevo familiar y defender la camiseta de su equipo. Jugó su primer partido oficial con el primer equipo del Real Oviedo contra el Baracaldo, en encuentro de Segunda División disputado en el estadio Carlos Tartiere.
El entrenador del Real Oviedo, Nando Yosu, alineó en aquel partido el siguiente once inicial: Viti, Naves, Antuña, Vicente, Domingo, José Carlos, Omar, Darío, Herbera, García Barrero, Larrañaga. En la segunda parte Jaime Serrano sustituiría a Larrañaga y Barrero entraría en lugar de García Barrero.
El Real Oviedo se impuso en dicho encuentro al conjunto vasco por 3-0. Omar, Jaime Serrano y Herbera marcaron los goles, anotados todos en la segunda parte.
Aunque había jugado algún tiempo de extremo antes de dar el salto a la primera plantilla, García Barrero actuaba de centrocampista en el primer equipo del Real Oviedo, al igual que había hecho su padre.
Fue cedido al Palencia en la temporada 1983-84, al término de la cual regresó a la primera plantilla del conjunto carbayón. En la temporada 1984-85 García Barrrero ganó con el Real Oviedo la Copa de la Liga de Segunda División, en cuya final a dos partidos marcó los dos goles del equipo carbayón. Hasta su marcha del club en 1987, García Barrero jugó seis temporadas en el primer equipo del Real Oviedo.
