Los azules, tras una fenomenal primera mitad donde consiguieron sus dos goles, se imponen al filial rojiblanco po 0-2 y rompen la racha de dos jornadas sin conseguir el triunfo.
ALINEACIONES:
Sporting de Gijón B: Sergio Sánchez; Alain, Checho, Omar, Rochela, Lora, Pablo Acebal (Abilio, min. 78), Alonso, Sergio Prendes; Carlos Álvarez (Jorge, min. 86) y Carlos.
Real Oviedo: Aulestia; José Luis, Iker Lasarte, Lucas Iglesias, Bravo; Falo, Curro, Sergio Villanueva (Jaime, min. 86), Bruno (Roberto Santos, min. 79; Pacheta (Mario Prieto, min. 68) y Diego Cervero.
ÁRBITRO:
Coronas Durán. Amonestó a los locales Sergio Prendes, Omar, Carlos Álvarez y Carlos, y a los oviedistas Bruno, Lasarte y Aulestia.
GOLES:
0-1, min. 13. Cervero, de penalti.
0-2, min. 39. Bruno, a puerta vacía tras regatear a Sergio Sánchez.
INCIDENCIAS:
Encuentro correspondiente a la 23ª jornada del campeonato de tercera división, disputado en el estadio de El Molinón ante cerca de 3.500 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria de David Rodríguez, joven ovetense fallecido en trágico accidente de tráfico en la mañana del sábado en la provincia de Lugo.
Así sí. El Real Oviedo solventó la crisis de resultados de las últimas jornadas con una merecida victoria ante el Sporting B. Los de Carrasco, que disputaron uno de sus mejores partidos de la temporada, sumaron una importante victoria que les permite recuperar el liderato. Cervero, que ya suma 18 goles, y Bruno fueron los autores de los tantos oviedistas.
El técnico azul, Lobo Carrasco, presentó un once con varias novedades respecto al que empató, hace apenas siete días, con el Ribadesella CF. La principal novedad fue la vuelta al 1-4-4-2. Así, Aulestia volvió a defender, una semana mas, la portería. En línea defensiva se situaron José Luis e Iker Lasarte en los laterales y Bravo y Lucas como pareja de centrales. En el centro del campo se colocaron Falo, Curro, Villanueva y Bruno, siendo la dupla atacante para Diego Cervero y Pacheta.
El encuentro comenzó con empuje local, sobre todo en la banda izquierda, donde Sergio Prendes dispuso de la primera oportunidad, pero Aulestia atajó sin problemas. No obstante, esa presión rojiblanco duró apenas cinco minutos, tiempo que tardaron los de Carrasco en adaptarse al terreno de juego y en adueñarse del balón. Falo y Curro se adueñaron de la parcela central y comenzaron a surtir de balones a Sergio Villanueva y Bruno, futbolistas que estuvieron muy acertados en la mayoría de sus actuaciones.
Precisamente, de las botas del jugador mierense nació la primera ocasión azul, disparando desviado tras pared con Pacheta en el minuto 10. Apenas 3 después, Cervero controló un gran pase interior de Villanueva, y, tras regatear a su marca, fue agarrado por Omar. El árbitro decretó penalti y el propio ariete azul fue el encargado de inaugurar el marcador.
Tras ese tanto, los de Carrasco, con largas posesiones de balón, buscaban la velocidad de Villanueva y Bruno para acercarse a la meta rojiblanca. Precisamente, fruto de ese objetivo, los oviedistas reclamaron un segundo penalti en el minuto 18, cuando Bruno cayó al suelo tras un agarrón de Checho.
Los rojiblancos, por su parte, no creaban sensación de peligro y sus únicas aproximaciones a Aulestia eran con tímidos disparos desde el borde del área que el guardameta vasco blocaba sin problemas.
Ante esto, los azules seguían volcándose en ataque y disfrutaron, en el minuto 36, de una clara ocasión para anotar el segundo tanto, pero el travesaño repelió el disparo de Pacheta tras una buena pared con Diego Cervero. Y apenas 3 después, llegó el ansiado gol oviedista. Bruno, recibe un balón procedente de su línea defensiva y, tras regatear a Sergio Sánchez, anota a puerta vacía.
En los instantes finales, los rojiblancos disfrutaron de dos ocasiones en las botas de Sergio Prendes y Carlos Álvarez, pero sus disparos fueron atajados por Aulestia con grandes paradas.
Tras el tiempo de descanso, los locales salieron dispuestos a recortar la distancia en el marcador. Para ello, buscaban balones largos a la espalda de los centrales oviedistas, pero las buenas intervenciones de Aulestia lo impidieron. El guardameta vasco se erigió en uno de los protagonistas del partido.
Para contrarrestar ese juego rojiblanco, Carrasco dio entrada en el centro del campo a Mario Prieto, quien otorgó una mayor fluidez al juego y sirvió balones a los jugadores más adelantados de su equipo, especialmente a Sergio Villanueva que se mostró muy activo durante el encuentro e incluso sufrió una dura entrada en los minutos finales que provocó su sustitución por Jaime.
Precisamente, y coincidiendo con la entrada de Mario Prieto, las ocasiones rojiblancas desaparecieron y el juego se desarrolló en la parcela central. Los jugadores azules evitaron cualquier aproximación local, salvo una en el tiempo de descuento, cuando Abilio, tras regatear a Aulestia, chutó desviado.
