Los azules perdieron el amistoso en la localidad palentina de Alar del Rey con un gol encajado a sólo tres minutos del final (1-0).
El guardameta Aulestia se convirtió en uno de los protagonistas del choque al atajar cuantos balones le dispararon, excepto en el del gol, que se coló por debajo de la barrera, pero que incluso llegó a tocar.
Palencia, 1; Real Oviedo 0
ALINEACIONES:
Palencia CF: Rebollo (Diego Pastor min. 46); Luis Cuenca, Serrano, Pepe Saavedra (Gorka, min. 29), Aitor Blanco (Marcos Belerda, min. 77); Fernando (Iván Pelayo, min. 46), Durantez (Msanguka, min. 68) , David Asensio (Aisu, min. 79), Agostinho (Alberto, min. 59); Carlos Becerra (Guillermo, min. 70) y Alberto Castaño (Daniel Nieto, min. 46).
Real Oviedo: Aulestia; Gonzalo, Dani Hedrera, Fariña; Curro, Mario Prieto; Jaime (Nacho Méndez, min. 74), Alex, Villanueva (Nacho López, min. 68), Matías (José Luis, min. 46); y Jorge Rodríguez (Diego Cervero, min. 46).
ÁRBITRO:
Alberto Millán Fernández, del Comité Castellano – Leonés. Amonestó a los oviedistas Matías, Dani Hedrera, Diego Cervero y Alex.
GOL:
1-0, min. 87. Iván Pelayo, de lanzamiento raso de falta directa.
INCIDENCIAS:
Encuentro amistoso disputado en el campo municipal de Alar del Rey (Palencia) ante cerca de 500 espectadores. Presencia de seguidores oviedistas en las gradas. El Real Oviedo vistió camiseta y pantalón verde.
El técnico Raúl González presentó el mismo esquema de juego que empleó en la segunda parte del partido del pasado miércoles ante el Zamora CF. Así, el avilesino optó por un 1-3-2-4-1.
En la portería volvió Aulestia, tras su descanso ante el conjunto zamorano. La línea de tres hombres defensiva estuvo formada por Dani Hedrera, Gonzalo y Fariña. El doble pivote fue para Curro y Mario Prieto, formando en el centro del campo con Matías como carrilero izquierdo, Jaime en el derecho, y Alex y Sergio Villanueva de enganches con Jorge Rodríguez, que fue se situó como referencia ofensiva.
Al igual que ya sucedería el pasado miércoles ante el Zamora, el partido dejó de ser muy pronto amistoso. Ambos conjuntos se esforzaron al máximo en cada una de las acciones y el juego se realizaban en la parcela central, donde Mario Prieto, omnipresente en la tarde de hoy, y Curro buscaban adueñarse de una parcela central en la que los pivotes palentinos, Fernando y Durantez, se esforzaban con excesiva dureza.
Los oviedistas tardaron casi treinta minutos en acostumbrarse al cambio de esquema. La amplitud de campo que buscaba Raúl González con esta variación táctica chocó con las reducidas dimensiones del campo, si lo comparamos con el estadio Carlos Tartiere.
Así, las primeras tres ocasiones del partido fueron para el cuadro palentino, que tuvo en el extremo Agostinho a su mejor hombre de la primera mitad. El portugués, que llegó a jugar en Primera División con el Málaga, ganó en velocidad a Dani Hedrera en el minuto 7 y encaró a Aulestia, que le arrebató el balón de los pies con una ágil estirada.
Su segunda aparición llegó en el 16, con un pasado lanzamiento de falta que remató Serrano en semifallo en el segundo palo, obligando a Aulestia a realizar otra bonita parada.
Y, la tercera, llegó en el minuto 19, cuando Agostinho asistió en profundidad a Carlos Becerra, atajando Aulestia de nuevo el disparo.
Mediado el primer periodo, los azules, hoy de verdes, comenzaron a mover el balón con rapidez en la parcela central y llegaron con peligro a las inmediaciones del exoviedista Rebollo, que atajó los disparos cruzados de Jaime y Alex.
En el 39, Sergio Villanueva culminó una bonita jugada individual con un potente derechazo que se estrelló en el cuerpo de Aitor Blanco.
A pesar de esa superioridad oviedista en el tramo final, serían los palentinos quienes gozaron de la última ocasión antes de irse al descanso. Alberto Castaño ganó la línea de fondo y asistió atrás para la llegada de Agostinho, quien no llegó a rematar por muy poco.
Ante los problemas que estaba creando el Palencia por las bandas, donde Matías y en especial Jaime, éste habituado a jugar más por dentro para crear el juego ofensivo, no se mostraban cómodos como carrileros, el avilesino optó por cambiar el esquema de juego y regresar al clásico 1-4-4-2.
Para ello dio entrada a José Luis en el lateral izquierdo, pasando Gonzalo al derecho y Fariña y Hedrera en el centro. El centro del campo fue para Jaime en banda derecha, Curro y Mario Prieto en el centro, y Sergio Villanueva en la izquierda. En la línea ofensiva seguía Alex, en esta ocasión acompañado del recién incorporado Diego Cervero.
Esta segunda mitad siguió con la tónica habitual de lucha en el centro del campo. Las faltas eran constantes y los carbayones no podían enlazar muchos pases seguidos. Eso si, cuando lo hicieron, llegaban con internadas por banda de Jaime y Villanueva, que solventaban la experimentada defensa morada.
El Palencia, por su parte, basó todo su bagaje ofensivo en disparos desde la frontal del área, que fueron respondidos de manera impecable por Aulestia, muy seguro en todas sus acciones. En el 55, el de Ondarroa, con una impresionante mano, sacó el balón de la escuadra derecha tras una falta directa de Agostinho.
Y, en el 73, una falta directa botada por Serrano se marchó rozando el poste izquierdo de la meta de Aulestia.
En el tramo final, los oviedistas ahogaron con su fuerte presión la salida de balón de un equipo palentino que erró numerosos pases en la parcela central, algo de lo que se aprovechó Mario Prieto para intentar sorprender al guardameta Diego Pastor, pero su disparo desde el centro del campo se marchó desviado.
Ya en el minuto 87, con el Real Oviedo volcado sobre la meta de Diego Pastor, llegó el solitario tanto del Palencia. Aisu ganó en velocidad al defensa Dani Hedrera, quien se vio obligado a hacerle falta. El encargado de ejecutarla fue Iván Pelayo, que batió a Aulestia con un disparo raso que se coló ajustado al poste derecho, tras pasar por debajo de la barrera y pese a que el meta llegó a tocarlo.