La calle con el nombre del gran delantero del Real Oviedo Isidro Lángara Galarraga fue inaugurada hoy en las inmediaciones del estadio Carlos Tartiere con presencia del presidente del Real Oviedo, Jorge Menéndez Vallina, el alcalde de la ciudad, Wenceslao López, el resto de corporaciones municipales, y una nutrida representación de la familia del jugador.
La placa de la vía con el nombre de Isidro Lángara Galarraga fue descubierta conjuntamente por el presidente del Real Oviedo, el alcalde y Junkal Guerrero Lángara, sobrina nieta del delantero vasco.
En su intervención Menéndez Vallina lamentó el hecho de no poder disfrutar de vídeos de las grandes jugadas del delantero oviedista. "Cuando hablamos de figuras como la de Lángara me gustaría ser más viejo, para haberlo disfrutado", afirmó el presidente en un emotivo discurso que evocó la grandeza del goleador.
Por su parte, Junkal Guerrero, en representación de la familia, de la que veinte miembros estaban presentes hoy en el acto de inauguración, destacó de su tío, también de modo muy emocionado, tanto su gran bondad como su gran oviedismo. “Él siempre preguntaba por el Real Oviedo, allá donde estuviera, en España o México. Hoy estaría profundamente emocionado, en su humildad", afirmó.
Dos representantes de la familia, Asier Guerrero Lángara y su padre, Jesús Guerrero, presenciaron ayer desde el palco de honor, invitados por el Real Oviedo, la victoria del conjunto azul frente al Mirandés.
Guerrero Lángara, accionista del club desde 2012, cuando decidió comprar acciones para ayudar al Real Oviedo a salir de la difícil situación que atravesaba, recibió ayer el título que le acredita como copropietario de la entidad carbayona.
Lángara, uno de los grandes jugadores de la historia del fútbol, fue un elemento fundamental en el equipo del Real Oviedo que en 1933 se convirtió en el primer conjunto asturiano que ascendió a Primera División.
Máximo goleador en Segunda en aquella temporada, consiguió ser Pichichi en Primera División con el Real Oviedo, de forma consecutiva, las tres campañas siguientes.
Aún hoy mantiene varias marcas, como la de ostentar el mejor promedio goleador en la Primera División española, ser el único jugador que ha conseguido tres hat-tricks en tres partidos consecutivos en la máxima categoría del fútbol español o el haber sido quien menos partidos ha necesitado, en esa misma división, para marcar 100 goles.