El jugador del Real Oviedo en los años setenta Óscar Evangelista Bravo Junco, que formó parte del equipo que ascendió a Primera en 1972, fue homenajeado el domingo en el Carlos Tartiere.
El presidente del Real Oviedo, Jorge Menéndez Vallina, le entregó a Bravo, en el palco de honor del estadio, un cuadro con una foto en la que aparece el jugador hispanoamericano antes de un partido en el Tartiere.
Óscar Evangelista Bravo Junco, nacido el 4 de octubre de 1949 en la localidad de Santa Fe (Argentina), se incorporó al Real Oviedo en 1971, procedente del Boca Juniors.
En su primera temporada en el Real Oviedo, la campaña 1971-72, el equipo ascendió a Primera como campeón de Segunda. Bravo jugó dos temporadas más en el Real Oviedo; fueron las dos siguientes, ambas en Primera División.
