El guardameta valora el esfuerzo del equipo para sumar la victoria ante el Córdoba, y explica que a raíz de la expulsión "nos pusimos el mono de trabajo y nos mentalizamos para pasarlo mal, darlo todo y no encajar"
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Rubén Miño, guardameta del Real Oviedo, ha pasado esta mañana por sala de prensa tras el entrenamiento del equipo en El Requexón.
El guardameta catalán ha valorado el triunfo del equipo ayer ante el Córdoba: "sacar los tres puntos después de sufrir, estar toda la segunda parte sin poder respirar con un jugador menos, sí que se saborea más. Nos da confianza, moral, nos refuerza. Es importante". Miño contaba además que "ayer hablábamos después del partido, que una victoria ante un rival como el Córdoba, con jugadores de Primera, el hecho de que nos juntáramos y aportáramos ese trabajo y humildad, y la gente se volcara con el equipo, es muy importante".
El portero oviedista explica que tras la expulsión de Verdés "el equipo se puso el mono de trabajo y se mentalizó para pasarlo mal, darlo todo en defensa para no encajar, y así fue". Sobre sus sensaciones, Miño comentaba que "trabajo siempre, y es más fácil cuando nuestros defensas están encima y no dejan rematar. Para eso estamos, para intentar parar lo que no han podido detener antes".
Finalmente, y sobre el próximo partido ante el Llagostera, Rubén Miño es de la opinión de que "es el partido más importante. Es nuestro partido, es una nueva final. Hay que salir a ganar el partido, sabiendo que no va a ser fácil. El Llagostera en su campo hace bien las cosas. Esperemos que tenga un mal día y sobre todo ser un equipo serio, no conceder ocasiones y llevarnos los tres puntos", sentencia.