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La maldición de Oreyana

Decididamente, Oreyana no es precisamente talismán para el Real Oviedo. En la tarde de ayer, en un nuevo partido amistoso de preparación en esta pre...

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Decididamente, Oreyana no es precisamente talismán para el Real Oviedo. En la tarde de ayer, en un nuevo partido amistoso de preparación en esta pretemporada, caímos derrotados por 2-0 ante el Ribadesella. En las dos temporadas en Tercera no logramos ganar allí y hoy nuevamente se repitió la historia, en condiciones totalmente diferentes, claro está.

No hubo tensión ni intensidad en el encuentro, tras el partido del día anterior en El Molinón y la sesión de trabajo matinal. Pero lo importante es el trabajo que se haga en la pretemporada como base para el resto del año, no los resultados de estos partidos.
Si bien el Real Oviedo llevó el control la mayor parte del partido, fue el Ribadesella quien supo sacar provecho de sus ocasiones, mostrándose como un equipo serio y que este año puede volver a entrar en fase de ascenso. A ello ayudará Alberto, jugador cedido por el Real Oviedo que ayer ocupó la banda izquierda en el segundo periodo. Esperamos y deseamos que tenga mucha suerte.

La nota negativa vino involuntariamente del jugador local José Luis, quien, tras recibir un fortísimo balonazo en la cara, tuvo que ser retirado del campo y posteriormente trasladado en ambulancia hasta un centro hospitalario. Sin embargo, las noticias que circulaban por Oreyana, en principio rumores, apuntaban a una lesión en un tobillo, quizá fruto de la caída. Sin poder avanzar más sobre su estado, sólo podemos desear que no sea nada y que pronto vuelva a defender los colores de su equipo.

En el once inicial del Real Oviedo sólo había cuatro jugadores de los que participaron en el Trofeo Principado. Ponzo ocupó la portería, con Corvera en el lateral derecho y Labrado en el izquierdo. Pablo y Lucas fueron los centrales, mientras que la parcela central era para Nico Rotundo y Servando, con Mora de volante izquierdo y Moisés en la banda opuesta. El juvenil Álex actuó de enganche con el hombre más adelantado, Raúl Castillo.

Este primer tiempo fue de dominio oviedista, con algunas ocasiones que no fructificaron, una de ellas la que acabó con José Luis en el hospital. El fuerte lanzamiento de Moisés lo repelió el riosellano, acabando la jugada en saque de esquina.
Moisés, nuevamente, y Castillo pudieron marcar en sendos remates de cabeza, pero la defensa y el portero interceptaron el balón. Y Labrado también tuvo su oportunidad en un saque de esquina, pero el balón le llegó a la pierna derecha, que no es la suya, y su lanzamiento resultó poco contundente.

En la segunda mitad, Ricardo ocupó el lugar de Raúl, Iván el de Ponzo y Michu salió por Rotundo. En el ataque, Adrián sustituyó a Álex, pasando a jugar con dos hombres en punta. Pudo llegar pronto el gol azul, en una jugada trenzada que finalizó en un pase desde la izquierda de Labrado que Castillo remató de cabeza para que Emi enviase a corner.

Pero el gol cayó para el bando local. Una falta sacada en el centro del campo llegó a Mini, que tocó de cabeza lo justo para batir a Iván en su salida. Y diez minutos antes de la finalización el Ribadesella logró el segundo, en pies de Ramonín, que recibió el balón de Tuero y batió a Iván en su segundo intento, al repeler nuestro portero su primer lanzamiento.

Hoy proseguirán los entrenamientos en el Requexón, disputándose mañana, sábado, el último partido de la semana, en esta ocasión ante el S.D. Colloto, en el Nora, a partir de las 11:45.