El Real Madrid, cuya gran historia está jalonada de épicas remontadas, triunfos increíbles y goles en el último suspiro, padeció en 1992 una inesperada derrota ante el Real Oviedo, con un tanto del jugador Lacatus en los instantes finales de un partido disputado en el estadio Carlos Tartiere.
Era como hoy un 9 de mayo y el Real Oviedo jugaba contra el Real Madrid en partido correspondiente a la trigésima cuarta jornada del Campeonato Nacional de Liga de Primera División.
El entrenador del Real Oviedo, Javier Irureta, dispuso el siguiente once inicial: Viti, Armando, Jerkan, Luis Manuel, Gorriarán, Elcacho, Bango, Vinyals, Paco, Jankovic, Carlos. En el minuto 75 Sarriugarte sustituyó a Carlos. En el 85 Lacatus ocupó la plaza de Jankovic.
El gol que suponía la victoria del Real Oviedo llegó cuando pasaban dos minutos del 90. Lacatus se hacía con un balón en el área del Real Madrid y, cerca del punto de penalti, disparaba a puerta y lograba el único tanto del partido. El Tartiere explotó de alegría y pocos segundos después el árbitro señaló el final del encuentro. Era sábado por la noche. La velada se prolongó largamente para muchos oviedistas.
