Tras la victoria por 1-2 del Real Oviedo ante la UD Almería en la ida de las semifinales del playoff de ascenso, Veljko Paunovic compareció en rueda de prensa con un mensaje claro: satisfacción por el resultado, pero sin espacio para el conformismo. El técnico carbayón destacó la capacidad del equipo para reaccionar en los momentos difíciles del partido, aunque no ocultó su preocupación por la bajada de nivel en la segunda parte.
“El equipo supo sobreponerse en momentos difíciles y conseguir un gol muy importante. La segunda parte no fue buena y quiero ser autocrítico. Este equipo puede jugar mucho mejor y lo ha demostrado en el primer tiempo pero no podemos tener esos lapsos en los que nos olvidamos de atacar. Hay que tener profundidad”, señaló Paunovic con sinceridad.
Pese al valor del triunfo y al gol de Nacho Vidal en el descuento, el técnico insistió en que la eliminatoria sigue abierta y que no deben caer en la autocomplacencia: “El resultado es muy positivo y por ahí nos podemos relajar, desde el equipo hasta el entorno que estamos, pero queda el segundo partido y todavía queda mucho. Tenemos que mejorar en muchos aspectos. A nivel defensivo y de pundonor sí estuvimos fantásticos ante un rival que hizo buen fútbol”.
Paunovic habló también de la dimensión emocional del equipo y de la importancia de creer incluso en los momentos más exigentes: “Hemos hecho un trabajo de aferrarse al poder de la fe. Cuando eso está ahí, el cuerpo sigue y es una plataforma para que pueda florecer el talento de los jugadores. No es todo esto, hay que hacer otras cosas para alcanzar el objetivo final”.
El técnico dedicó elogios especiales a Nacho Vidal, autor de los dos goles oviedistas en Almería: “Tiene una predisposición que pocas veces se ve de un jugador que viene en enero y aporta tanto al equipo y tanta identificación. Es uno de los líderes del vestuario, el primero que llega y el último que se va. Sus cualidades, talento y carácter es capaz de trasladarlo al campo”. También valoró la aportación de Paraschiv en los últimos minutos, destacando su carácter y compromiso: “Su aportación ha sido crucial. El chico trabaja, no pone mala cara. Tiene una capacidad y un aire estoico. Es un fenómeno y ese carácter representa a nuestra afición, que es fuerte y estoica”.
Aunque el equipo suma ya 11 partidos sin perder desde su llegada, Paunovi restó importancia a las cifras y puso el foco en lo que viene: “Estas victorias no son mías, lo que está consiguiendo el equipo es de todos, y el motor de esto son los jugadores. Todo lo que se ha hecho no vale para nada, incluso lo de hoy. Hay que pensar en lo siguiente”.
Preguntado por cómo vivió el segundo gol, admitió la emoción del momento: “No me lo creía. Cuando vi el balón pegando al poste pensaba que no iba a entrar. Fue emocionante. En el siguiente momento pensé: ‘tranquilo, que aún queda mucho’”.
Finalmente, tuvo palabras de agradecimiento para los más de 500 aficionados del Oviedo desplazados a Almería: “A todos los 500 y más, un agradecimiento tremendo. Se han notado en el campo y ese apoyo que dan lo percibimos. Nos ayuda a sacar lo mejor de nosotros mismos”. De cara al partido de vuelta, Paunovic fue claro: “Es un pasito. Solamente existe el siguiente partido. Tenemos que estar en nuestra mejor versión para volver a jugar y competir ante un buen rival”.