Orgullosos de vosotros. El Juvenil del Real Oviedo cae derrotado ante el RCD Espanyol en las semifinales de la Copa del Rey por 3-1 en una cita histórica para los de Paco Fernández que tuvieron el apoyo de más de 4.000 oviedistas en el Carlos Tartiere.
El conjunto azul llegaba a esta eliminatoria tras superar al Granada, Cádiz y Levante en las ronda previas y demostró de lo que es capaz. Los ovetenses compitieron de tu a tu al conjunto catalán aunque dos acciones aisladas en el primer tiempo decantaron la balanza. Lluc marcó el primero con un tanto discutido por una posible falta a un defensor del Real Oviedo aunque el colegiado no indicó nada.
Pocos minutos más tarde llegaría el segundo obra de Sergio Rivarés. 2-0 y descanso. Tras la reanudación, los carbayones salieron con todo y tuvieron las suyas aunque gol no terminaba de llegar. Coballes fue derribado tras la reanudación dentro del área aunque el colegiado no señaló nada. Paco Fernández movió el banquillo y dio entrada a Martín, Pablo Agudín y Ángel Conde.
En el 89´, Marcos Lopes recortaba distancias y volvía loco al oviedismo que confiaba en llevar el encuentro a la prórroga. El tanto fue solo un espejismo y es que en la siguiente jugada el RCD Espanyol ponía el tercero y sentiaba el choque.
Pese a la derrota, el Juvenil A hace historia logrando jugar por primera vez en la historia las semifinales de la Copa del Rey Juvenil. Orgullo, valor y garra para unos chicos que lo dejaron todo en el campo y defendieron el escudo del Real Oviedo en lo más alto.