NOTA PUBLICA DEL ENTRENADOR DEL REAL OVIEDO
DESEO ACLARAR PUBLICAMENTE por respeto al fútbol en general y al club y la afición que represento –Real Oviedo- en particular, el contexto de mis declaraciones la víspera del partido ante el Siero disputado el domingo diecisiete de febrero de 2008:
1º, La extracción publicada de las palabras “no tendremos piedad en el campo” llevaban la noble intención deportiva de respetar al adversario tanto como nos respetamos a nosotros mismos.
La palabra piedad, en el “código” profesional futbolístico, es sinónimo de laxitud y relajación. Por lo tanto, mi deber era mantener a nuestro futbolistas “conectados” al partido y con ese fin obré.
2º, Pasadas unas horas y realizando un breve ejercicio de empatía, he resuelto mandar todos los perdones que sean necesarios a la afición del Siero, a sus dirigentes, a sus empleados y a los integrantes del cuerpo técnico con sus respectivos jugadores por tal confusión ya que esa declaración iba enfocada hacia nuestro profesionalismo.
A ellos, que también pertenecen a mi familia, la futbolera, aprovecho estas letras para desearles una excelente y meteórica recuperación, tanto económica como deportiva.
3º, A colación, extiendo mi solidaridad a todos los clubes de la 3ª división de Asturias que atraviesan por momentos difíciles y luchan valerosamente, día a día, por sobrevivir. En el fondo, ellos son los verdaderos héroes de nuestro grupo.
4º, Por último, es mi deseo seguir contribuyendo al fortalecimiento del JUEGO LIMPIO actuando con buena educación, elegancia y el máximo respeto con todas las aficiones y con todos nuestros adversarios mientras esté en el Real Oviedo. Si no fuera, sinceramente, así, entiendo que no merecería estar al frente de tan ilustre club y tan distinguida afición.
FDO.: Francisco Carrasco
