El Real Oviedo regresó esta mañana al trabajo en El Requexón con la vista puesta en el encuentro de este domingo ante el Rayo Vallecano en el Carlos Tartiere.
Tras la sesión, el lateral azul Nacho Vidal analizó la situación del equipo, el estilo de juego y el reto inmediato ante el conjunto madrileño.
El defensor destacó la actitud del equipo en la vuelta a los entrenamientos: “Lo que he visto hoy en el entrenamiento es a la gente muy metida y con muchas ganas. Respirar eso en el día a día es súper positivo. Sabemos lo que tenemos que hacer y cuál es nuestro trabajo; conocemos las fortalezas del Rayo y tenemos que olvidarnos del ruido externo para encarar este partido con la importancia que tiene. Tenemos muchas ganas de ganar, y más delante de nuestra gente”.
Preguntado por la trascendencia del choque ante el Rayo Vallecano, Vidal subrayó la importancia de mantener la perspectiva, asegurando que “lo de este domingo es igual de importante que los doce partidos anteriores. Son los mismos puntos y tenemos que afrontarlo como tal. Para mí, todos los partidos tienen la misma importancia. Cada encuentro tiene que ser como ir a una mina e intentar sacar oro”.
El lateral analizó también las claves futbolísticas del duelo y la evolución del equipo, reconociendo que “el Rayo presiona mucho y bien, y pasa mucho tiempo cerca de la portería rival. Nosotros tenemos nuestro estilo y tenemos que intentar imponerlo, pero también hay que saber leer los partidos y no darnos cabezazos contra la pared. Basándonos en las directrices del cuerpo técnico, sí, pero siendo capaces de tomar decisiones y jugar con personalidad”.
En cuanto a sus sensaciones a nivel personal, Nacho Vidal destacó que “siento la confianza del míster y de mis compañeros. Trabajo muchísimo e intento mejorar en todos los aspectos. Es verdad que cuando el equipo no está funcionando del todo, cuesta sacar tu mejor versión, pero me siento bien y con un peso importante dentro del vestuario. Me gusta ese rol de crear sinergias entre compañeros; eso nos hace falta para crecer”.
El lateral valoró también la posición del equipo en la tabla: “A nivel clasificatorio, el análisis es objetivo: no es agradable verte en la cola. Estamos en una situación preocupante, pero no súper límite o irreversible. Este pequeño descanso nos ha venido bien, necesitábamos desconectar la cabeza. Hoy he visto a la gente muy metida y con mucha ambición”.
Finalmente, sobre cómo afrontar las próximas jornadas, fue claro: “Yo intento aislarme del contexto y de la clasificación. Hoy es una, pero en dos semanas puede ser otra. Tiene más sentido asentar el estilo sobre el que queremos movernos; eso nos dará gasolina para escalar. Hay que remar todos juntos. Si en un mes logramos sumar puntos, lo que hoy hablamos sobre la clasificación ya no tendrá sentido”, sentenció.