Ilusión fue la palabra que más se repitió en todas y cada una de las eliminatorias disputadas por el Real Oviedo Femenino en la Copa de la Reina. Hasta el último segundo del último minuto, el equipo comandado por Andrea Suárez se dejó la piel en el césped para plantarle cara a todo un equipo de Liga F como es el Costa Adeje Tenerife.
A pesar de la hora del partido, cambiada trece horas antes del horario original, la grada de San Claudio presentó un lleno absoluto para arropar a las oviedistas. Antes del comienzo del partido, tanto Real Oviedo como Tenerife guardaron un minuto de silencio en memoria de Jhennifer Camargo, fallecida el pasado diciembre, junto a sus compañeras del Rodiles FSF.
Las carbayonas iniciaron el partido con Saray en portería, Gema, Alejandra, Iglesias y Riquelme en defensa, doble pivote con Buceta y Walsh, bandas para Nerea y Andrea y la punta de ataque para Sheila. Lejos de cerrarse atrás, el conjunto azul comenzó amenazando a las canarias con dos disparos lejanos de Abi Quiroz y Ana Buceta, estrellándose este último en el larguero. Mediada la primera parte, el Tenerife fue tomando el control del partido, lo que se tradujo en el 0-1 marcado a balón parado por Gavira. Las visitantes pudieron doblar su ventaja, sin embargo, Babajide se topó con el larguero tras un disparo lejano.
Tras el paso por vestuarios, el partido se atascó en el centro del campo, sin que sucediera nada en ambas áreas. El Real Oviedo logró dar un paso hacia adelante buscando nuevamente el gol desde fuera del área, consiguiendo llegar al área rival a base de acciones a balón parado. Anina entró en escena por Andrea Sordo, quien volvía de lesión, dándole algo de aire fresco a un equipo que se crecía en ataque con el paso de los minutos, mientras la defensa despejaba las amenazas que pudieran llegar al área de una Saray que se mostró muy segura bajo palos. La posterior entrada al campo de Helena Torres, Elena Pradilla y Pali, en detrimento de Nerea Sánchez, Abi Quiroz y Ana Buceta, añadió pólvora en ataque poco antes de que llegase el final. Fue Gema Ginés quien, con su teórica pierna mala, introdujo el balón en el área rival encontrando a una Sheila que controló de espaldas y le pegó a la media vuelta para marcar el tanto que llevaba el partido a la prórroga y a San Claudio a la locura.
Pali lo intentó a balón parado, mientras Helena controlaba todos los balones que se acercaban al área visitante, lo que permitió cederle un balón en la frontal a Marina Crespo que cerca estuvo de ser gol.
El Real Oviedo llevaba de nuevo a un equipo de superior categoría a los penaltis, donde esta vez la suerte sonrió a un Costa Adeje Tenerife que vio como Noelia Ramos frenó la épica oviedista con una gran tanda de penaltis.
“Nos vamos con la cabeza muy alta, orgullosas del trabajo que hemos hecho” aseguró Sheila tras el partido “hemos estado vivas todo el partido.”
“La valoración tiene que ser positiva” confirmó Andrea Suárez “hemos competido contra un equipo que está arriba en Primera División y debemos estar orgullosas del equipo.”
El equipo ovetense vuelve a centrarse en la liga tras aplazarse su partido de este fin de semana debido al partido de Copa, en una jornada que se cerrará el miércoles 24 de enero en Barcelona antes el RCD Espanyol B. Antes, el equipo jugará en casa ante el Rayo Vallecano este mismo sábado 20 de enero desde las 16:00h.