El Real Oviedo salió derrotado del Ramón Sánchez-Pizjuán tras caer por 4-0 ante el Sevilla FC en una nueva jornada de Liga. Los de Luis Carrión firmaron un partido muy gris en tierras andaluzas, sin capacidad de reacción ni opciones reales de puntuar.
El encuentro no pudo comenzar peor para los azules. Apenas se habían disputado tres minutos cuando el conjunto local aprovechó una rápida transición para adelantarse en el marcador y golpear anímicamente a un Oviedo que aún no se había asentado sobre el césped. El tempranero tanto de Adams condicionó el desarrollo del choque.
El equipo carbayón intentó rehacerse con algo más de posesión de balón, pero sin profundidad ni llegada sobre la meta local. Antes del descanso, el Sevilla volvió a encontrar premio y amplió su ventaja con el segundo gol obra de Sow, dejando el partido muy cuesta arriba para los de la capital del Principado.
Tras el paso por vestuarios, Carrión buscó una reacción con un doble cambio, dando entrada a Álex Forés y Dani Calvo, pero el guion no varió. El Sevilla siguió siendo dueño y señor del encuentro y, ya en la segunda parte, sentenció el partido con el tercer tanto. Batista Mendy culmión una gran jugada colectiva para batir por bajo a Escandell y poner el 3-0. El Oviedo no encontró respuestas ni con las posteriores incorporaciones de Brécalo, Javi López y Agudín, en un partido en el que nada funcionó y en el que el conjunto azul se vio superado. Ya en la recta final, Ejuke puso el cuarto y definitvo.
La derrota hace que el Real Oviedo siga en puestos de descenso, a cinco puntos de la permanencia. La próxima jornada, el Carlos Tartiere será escenario de un duelo clave ante el Celta de Vigo, donde los azules buscarán una reacción necesaria para ganar y recuperar sensaciones ante su gente.