Ante la pérdida de Francesc Arnau, la última jornada de competición, que enfrentó al Pontevedra y al Real Oviedo Vetusta en Pasarón, se convirtió en un duro trámite para los azules, pese a que trataron de aferrarse, con todas sus fuerzas, al orgullo, valor y garra que imprime el sentimiento carbayón para buscar la épica y mantener la categoría.
Perdió el filial azul por 3-0, aunque hasta la hora de partido los de Emilio Cañedo estuvieron dentro del mismo, proponiendo y buscando la meta local, sin acierto en esa última decisión que les permitiese abrir el marcador. El Pontevedra aprovechó un despiste de los azules para poner en 1-0, y, con el apoyo de su hinchada, anotaron dos goles más en su haber. El Real Oviedo Vetusta siguió peleando hasta el final del encuentro, aunque sin obtener la recompensa esperada.
En un fin de semana triste para el oviedismo, en el que el filial disputó su partido obligado por la Federación Española de Fútbol, el Real Oviedo Vetusta desciende a la 3ª RFEF y trabajará la próxima campaña para recuperar la categoría.
