CD Covadonga y Real Oviedo Vetusta se vieron las caras esta mañana en el Estadio Álvarez Rabanal, en la segunda jornada de competición regular para los de Emilio Cañedo, que acabó con el resultado de 1-3.
Dándole continuidad al once de la semana pasada, con las únicas novedades de Lorea y Joselu Guerra, los de Emilio Cañedo afrontaron el duelo ovetense, en el que fueron de menos a más. El filial presentó sus credenciales desde los primeros compases del choque, demostrando su oficio y sus ganas por sumar los tres puntos. David Ámez, Alex Suárez y Javi Cueto dispusieron de las ocasiones más claras del de un primer acto, en el que Berto Hórreo, con dos buenas intervenciones al filo del descanso, no tuvo mucho trabajo y el en el que Real Oviedo Vetusta compitió fiel a su idea de juego, muy aplicado en defensa y aprovechando la profundidad de sus hombres de banda. Con el resultado de 0-0 se llegó al ecuador del encuentro.
Tras el paso por vestuarios, el partido estuvo marcado por las decisiones arbitrales, con la expulsión de Joselu Guerra, por una acción rigurosa que el colegiado castigó con roja directa, y el penalti pitado al CD Covadonga, tras el derribo de un jugador en local en el área en un lance con Berto Hórreo. El CD Covadonga no falló y se adelantó en el marcador. Tras el tanto, los de Emilio Cañedo no le perdieron la cara al partido y siguieron buscando el gol. Javi Cueto, en un lanzamiento de falta desde la frontal, puso el empate, y, minutos más tarde, Ton Ripoll, al segundo palo, anotó el segundo para el Real Oviedo Vetusta. En los instantes finales del choque, Ripoll volvió a ver puerta, poniendo el definitivo 1-3 en el marcador.
Tres primeros puntos en el casillero del Real Oviedo Vetusta, que ya piensa en su próximo compromiso en liga, ante el Marino de Luanco. El partido se disputará el sábado, desde las 16:00 horas, en El Requexón.
