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“Hicimos el partido que convenía”

Se nota cuando comienza una semana después de una victoria. Las caras en el Requexón esta mañana lo decían todo. También el técnico, T...

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Se nota cuando comienza una semana después de una victoria. Las caras en el Requexón esta mañana lo decían todo. También el técnico, Toño Velázquez, parecía más relajado al atender a la prensa tras el entrenamiento.

¿Han vuelto las sonrisas al Requexón?
Ya dije la semana pasada que quedaba mucha liga, en sentido positivo o en sentido negativo. Queda mucho porque puedes quedar muy mal a todos los niveles, empezando por el Club como tal y acabando por el futbolista a título individual. Todos, cuerpo técnico, plantilla y aficionados, tenemos que estar con el Real Oviedo. Con la victoria de ayer nos reafirmamos y nos sentimos muy satisfechos porque el equipo al que ganamos es el segundo en la categoría y el más goleador. Para nosotros es una satisfacción ganar metiendo tres goles fuera de casa.

Será una satisfacción importante para vosotros viendo la gente que había ido a veros, desde Oviedo y desde sitios muy dispares.
Cuando llegamos allí vimos dos o tres autobuses, más la gente que fue en coche. La gente, independientemente de, sigue estando con el equipo, que es lo bonito y lo grande.

Lo bueno es que la gente está comprometida con el equipo, faltando alicientes y poniéndose por detrás en el marcador, reaccionaron muy bien ayer.
La gente en este deporte se examina todas las semanas y lo que pasó hace ocho días carece de importancia y de trascendencia al día del examen que toque semanalmente. Con esto quiero decir que la gente tiene que seguir jugando al fútbol, reafirmándose y cada vez que tiene una opción de jugar, más en una plantilla larga como ésta en la que además estamos incorporando juveniles que están haciéndolo bien, todo el mundo tiene la obligación de hacerlo bien o por lo menos intentar hacerlo bien.

Ayer el equipo cambió de sistema, cambió algunos nombres… y se sintió igual de cómodo.
Sí, ya digo que los sistemas son simplemente una posición de inicio y de partida y con unas referencias en función de tener o no el balón. Ayer cedimos el campo de la Real a ellos, dejándoles hacer circulaciones en su terreno de juego, puesto que sabíamos que son gente muy rápida y si hacíamos como habitualmente hacemos, presionando la salida del balón, no dejando salir jugando a ningún equipo y obligando a pegar de inicio siempre, en esta ocasión decidimos lo contrario porque a nuestra espalda teníamos muchos metros y ellos eran muy rápidos. Pero no era rapidísimo un hombre en concreto, incluso los laterales tenían mucho recorrido y unas piernas fabulosas.

Estando con 2-1 fue un planteamiento arriesgado, por lo menos de cara a la crítica.
Exactamente. El problema es cuando el partido no se pone de cara, que estuvimos tirando de los jugadores y amarrando un poquitín, porque una cosa es querer ir a por el partido y otra cómo nos conviene más ir a por el partido. Ayer eran dos cosas claramente diferentes. Hay que saber lo que te interesa. Cuando salimos a por el partido presionando y no llegabas a la presión, porque ellos tienen muy buenas maneras físicas, en las que te sacan en cinco metros tres, llegaron las dos ocasiones de gol que tuvieron. Nosotros, jugando como jugamos, tuvimos cinco o seis ocasiones de gol claras, de llegar uno contra uno ante el portero. Por lo tanto, creo que la forma de entender el partido ayer como lo entendimos y entendiéndolo todos y jugando todos a lo mismo, fue importante. Ahora bien, el partido no fue vistoso, especialmente cuando el partido se te pone cuesta arriba y sigues jugando a lo mismo. Pero teníamos claro que era lo que nos convenía.

Llamó la atención la entrada de Alberto y el cambio en la portería.
De inicio sólo podía optar entre Yeray o Alberto. Por las condiciones de cada uno, venía mejor Alberto, que jugó 70 minutos a buen ritmo y dando buen nivel. Yeray cuando salió también lo hizo en su línea de trabajo, que está teniendo desde que yo llegué.En la puerta, era el momento de dar un cambio y ver más cosas en este final de temporada, puesto que tampoco lo tengo muy visto desde que estoy aquí. Una forma de abrir posibilidades y que todo el mundo sepa que de aquí al final el equipo sigue abierto y todo el mundo tiene que tener interés por hacer las cosas bien.

Están aquí José Ángel García y Marco Pintado para hablar de tu renovación, ¿avanzáis hacia algún sitio o sigue quieto?
Yo sigo parado, plantado a las siete y media, de momento voy a esperar porque es muy pronto. Sé que ellos como Club tendrán que tomar sus medidas y sacar sus conclusiones, pero de momento yo no voy a hacer oficial ni a comunicar oficial ni oficiosamente a ellos ni a los medios ni a nadie en un sentido o en otro. De momento voy a esperar, quedan partidos muy importantes y voy a esperar un poco más, si lo tienen a bien. Si no lo tienen a bien, el Club es soberano y el Consejo tiene que estar por encima de los estamentos que estamos por debajo dentro del Club y ellos tienen que tomar sus decisiones, que son muy respetables.

Visitaste las instalaciones de Zubieta con José Ramón Eizmendi. Son impresionantes.
Es escandaloso, es increíble, suntuoso. Creo que hasta es demasiado lujo, empezando por la arquitectura, los servicios que tiene, la accesibilidad, el aprovechamiento del terreno, el estado de las instalaciones… Es una inmensa maravilla, si se quiere hacer algún tipo de instalación deportiva allí hay muchos ejemplos para tomar. Creo que es maravilloso. Quedé muy gratamente sorprendido.

Había mucha gente viendo a la Real B, animando a los chavales, quizá se vea más la idea de Club. Quizá eso nos falte en Oviedo.
Las instituciones tienen que sentirse reflejadas y todo el mundo tiene que jugar a lo mismo. Hay un sentimiento a nivel institucional, de ciudad, de socios, de aficionados de base… Todo el mundo rema en el mismo sentido. Y no pasa sólo con la Real, cuando jugamos en Zalla lo pudimos ver con el Athlétic. Si se baja, todo el mundo es del Bilbao, nadie piensa si se hicieron las cosas mal, si jugaron unos u otros, lo realmente importante es que el Bilbao no baje, lo realmente importante es que ellos son del Bilbao y que esté quien esté en el Bilbao, el Bilbao tiene que seguir y estar ahí. Ese sentimiento y esos colores están por encima de la gente que esté en cualquier momento a lo largo de su historia.