Tal día como hoy, un 13 de abril, en el año 1952, el Real Oviedo se proclamaba campeón del Grupo I de Segunda División, lo cual suponía el ascenso a Primera División.
El conjunto asturiano se enfrentaba aquel día al Club Gimnástico de Tarragona (actualmente Gimnàstic de Tarragona) en el Stadium de Buenavista. Era la trigésima y última jornada del campeonato liguero. El entrenador del Real Oviedo, Luis Urquiri, alineó para el choque a los siguientes hombres: Caso, Toni, Diestro, Celaya, Agustín, Pacheco, Miguel, Sará, Durán, Areta, Mandi.
Miguel, en la primera parte, Areta y Sará, en la segunda, fueron los autores de los goles del Real Oviedo en el partido, que finalizó con la victoria local por 3-0 y provocó una explosión de júbilo entre la afición oviedista.
Era la segunda ocasión en que el Real Oviedo conseguía un ascenso a Primera División. Esa temporada, la 1951-52, la Segunda División estaba dividida en dos grupos y los campeones de ambos ascendían directamente a la máxima categoría. En el Grupo II el campeón fue el Club Deportivo Málaga (desaparecido en 1992).
