Tarde de frío en el Plantío, aunque ni la afición castellana ni la asturiana se arredraron y acudieron en buen número al estadio burgalés. Más de 500 asturianos se desplazaron a animar a los suyos a tierras castellanas, convirtiendo la ciudad desde bien temprano en una fiesta azul y siendo protagonistas absolutos en la grada del Plantío.
Fue una tarde de reencuentros dentro y fuera del césped. Aurreko, portero del Burgos, fue jugador del Requexón durante bastantes años. Y Alberto Ballester, que el año pasado formó en el Real Oviedo, se encuentra esta temporada en el Burgos, aunque no disfruta de oportunidades. Todos tuvimos la oportunidad de saludarle.
Y una visita muy ilustre, la de Quique Herrero, jugador del Real Oviedo en las temporadas 85/86, 86/87 y 87/88, uno de los artífices del ascenso a Primera División en junio del 88. Con él pudimos hablar en el descanso del encuentro sobre aquella época y del Oviedo actual. El domingo próximo, publicaremos en nuestra revista Real Oviedo sus declaraciones.
Alineaciones:
Burgos C.F: 1 Aurreko, 18 Espeleta, 3 Guirado (Nandy 88’), 20 Aguilar, 5 Lucio (T.A. 79’), 8 J.A. Gómez, 9 Roberto (G. Sever 66’), 15 Sorribas (T.A. 35’), 23 Sisco (Martín Tártara 70’), 7 Samuel y 19 Óbolo (T.A. 75’).
Banquillo: 27 Cabrero (P.S.), 6 Martín Tártara, 17 Nandy, 16 López y 10 G. Sever.
Entrenador: Fabri González.
Real Oviedo: 1 Ponzo, 17 Nacho Fradejas, 5 Ricardo, 13 Lusarreta, 3 Borja, 2 Zamora (T.A. 27’), 14 Ismael (T.A. 23’) (Adrián 82’), 19 Rubén (T.A. 53’) (Yeray 92’), 10 Michu, 12 Nacho Rodríguez y 18 Nacho García.
Banquillo: 22 Rafa (P.S.), 8 Yeray, 20 Mora, 21 Jon Carrera y 23 Adrián.
Entrenador: Antonio Rivas.
Árbitro: Sr. Gorostegui Fernández, auxiliado por los señores Peñafiel Montalvo y Garaiz Bereciartua, del Colegio Vasco.
Goles:0-1. Lusarreta. Minuto 72.
1-1. Martín Tártara. Minuto 74.
El Real Oviedo jugó en la tarde de ayer con un sistema de cuatro defensas (Fradejas, Ricardo, Lusarreta y Borja), dos pivotes por delante (Ismael y Zamora), tres centrocampistas (Rubén, Michu y Nacho Rodríguez) y Nacho García en punta. Un dibujo que, si bien se vio superado en los primeros quince minutos, dio un extraordinario resultado en el final del primer tiempo y la segunda parte.
El Burgos que saltó al césped del Plantío sorprendió a todos, pendientes de recibir a un equipo defensivo y esperando la contra, aunque al final resultó un equipo lanzado a la meta de Ponzo. El primer cuarto de hora fue de dominio castellano, pero poco a poco el Oviedo se sacudió esa presión y pudo comenzar a desarrollar su juego, desgraciadamente sin acierto.
Fruto de ese mayor control del juego llegó una ocasión clara en el minuto 18, en un lanzamiento lejano de Rubén que Aurreko despejó de puños como pudo. En la siguiente jugada, nuevamente disparó Rubén, siendo la defensa la que sacó el peligro.
En el 25, Sisco sacó una falta directamente a puerta desde 25 metros de distancia y Ponzo repelió el balón. Eran minutos de desconcierto azul y al minuto siguiente fue Samuel quien pudo marcar, pero su lanzamiento salió fuera, demasiado cruzado.
Los últimos minutos de la primera mitad fueron de acoso azul sobre la puerta de Aurreko, con un disparo lejano de Nacho Rodríguez que no pudo sorprender al meta y se fue alto.
La polémica llegó en el 46, cuando un ataque oviedista finalizó cediendo el balón un defensa al portero, aunque el colegiado extrañamente interpretó que no había cesión antirreglamentaria.
El Oviedo salió en la segunda mitad con una mentalidad claramente ofensiva, lanzándose sobre la portería de Aurreko y metiendo al Burgos en su área. Las bandas, Rubén por la derecha y Nacho Rodríguez por la izquierda, trajeron de cabeza a la defensa burgalesa, surtiendo de abundantes balones al área ante el desconcierto de los defensas locales.
Sin embargo, el Burgos buscó la espalda de la defensa azul a la contra, como una jugada en el 61 muy bien llevada con el balón paseándose por la portería de Ponzo, de un lado a otro, en intentos de remate de cabeza infructuosos. Y un fallo defensivo poco después pudo haber acabado en gol al rebotar el balón en la defensa azul, pero Ponzo estuvo rápido de reflejos y cogió el balón.
Michu vio como un gol conseguido en el minuto 65 era anulado, al haber señalado el asistente fuera de juego previo. Poco después Rubén tuvo en sus botas el gol a pase de Nacho García, pero su envío salió fuera.
En el 69, Michu remató perfectamente de cabeza un pase de Nacho Rodríguez, saliendo el balón pegado al palo.
Y tanto va el cántaro a la fuente que tres minutos después una falta sacada por Rubén en la derecha del ataque es rematada por Pablo Lusarreta al fondo de la red, haciendo subir el 0-1 al marcador y levantando a la parroquia azul de sus asientos.
Mas poco duró la alegría, porque a los dos minutos el Burgos marcó su gol en un saque de esquina botado por Martín Tártara. En el campo se discutía si el balón había entrado directamente a puerta o lo había rematado finalmente Samuel. En el momento, nos pareció que el autor era Samuel y así lo pusimos en nuestro adelanto informativo, pero al finalizar el partido Rafa Ponzo comentó que el balón había entrado directamente desde la esquina. Así que a Tártara le apuntamos el gol.
Los minutos finales fueron de presión continua sobre la meta de Aurreko, aunque los lanzamientos de los nuestros los despejaba como podía el meta burgalés. Así y todo, el Burgos tuvo tiempo de sacar alguna contra, que la defensa azul resolvió con contundencia.
Un punto como resumen que sabe a muy poco, vista una segunda parte muy buena por parte del Real Oviedo, que jugó con mucha cabeza y ambición y sólo en un error puntual encajó el gol del empate. Un Oviedo que ilusiona y que mejora día a día.
SALA DE PRENSA
El primero en comparecer ante los medios de comunicación fue el técnico oviedista, Antonio Rivas, que comenzó diciendo que “tuvimos un error que nos costó dos puntos”. El partido comenzó siendo dominado por el Burgos, que “tuvo más control, pero luego fue nuestro”.
Sobre el juego de los suyos, Antonio decía que “hemos jugado a ráfagas, bastante bien cuando hemos tenido el balón, pero a veces nos precipitamos”.
El Oviedo “intentaba tener llegada por banda”, lo que produjo que si bien no hubo ocasiones excesivamente claras de gol, “ha habido más balones al área”.
Del gol de los locales, Rivas dijo que “Rafa se precipitó un poco y el lanzamiento fue bastante bueno”.
En el balance general, “no conseguimos puntos, pero el equipo lo está intentando”, como hoy en “un campo muy difícil”, lo que hace que haya que “dar por bueno el punto”.
El técnico local, Fabri, declaraba que le sabía “a poco el empate, porque pudimos ganar, pero creo que no es injusto, según se ha desarrollado el partido”. La idea general de lo visto es que “en la primera mitad estuvimos bien y en la segunda metimos el culo atrás”, quizá porque “el Oviedo ha achuchado bastante en la segunda parte”.
De nuestro equipo comentaba Fabri que “es un gran equipo y tiene muy buenos futbolistas. Ha estado muy bien plantado en el campo”.
MAÑANA, EN EL REQUEXÓN
La plantilla se ejercitará a partir de las diez y media, en las instalaciones del Requexón, con jornada de descanso mañana, martes.
Y en los partidos de la Escuela del Requexón disputados ayer, domingo, no hubo suerte para los dos equipos en acción. El equipo juvenil de Liga Nacional salió derrotado por 2-0 en su visita al Reocín cántabro, mientras que el equipo de Segunda Cadete perdió ante La Salle por 3-1, anotando el gol oviedista Moi.
El Pumarín, por su parte, venció al Quintueles por 1-0.
Una buena noticia de este fin de semana ha sido la llegada de parkas para el equipo juvenil de División de Honor, entregadas desinteresadamente por Industrias Cima.
