Tal día como mañana, un 18 de enero, en el año 1953, el Real Oviedo hacía subir a su casillero del marcador el número 5, popularmente llamado *jorobu *por la afición carbayona, y se imponía con autoridad al Atlético de Madrid, en el estadio de Buenavista.
El triunfo le servía al conjunto carbayón para colocarse en los puestos de cabeza de la clasificación de Primera División; concretamente en la cuarta posición, compartida con el Barcelona y el Sevilla, tras dieciséis jornadas de liga disputadas.
El Real Oviedo, cuyo entrenador era Luis Urquiri, formó en aquel partido con Argila, Toni Cuervo, Celaya, Diestro, Durán, Pacheco, Szegedi, Areta, Mandi, Salaberry y Basabe.
Durán fue el autor de los dos primeros goles del partido, marcados en la primera parte. Areta haría el 3-0 en los primeros minutos del segundo tiempo. Lozano, del Atlético de Madrid, anotaría en propia puerta el cuarto gol del encuentro. Y Mandi sería quien marcase el *jorobu*, el quinto y último gol de un partido redondo para los azules.
ES
